Es muy útil situar las unidades de longitud ordenadas
de mayor a menor en una escalera.
Cada vez que se baja un peldaño, hay que multiplicar x 10;
si se bajan dos peldaños, debéis multiplicar x 100.
Al contrario, si se sube por la escalera, en vez de multiplicar,
hay que dividir entre 10 si es un peldaño; entre 100, si son dos peldaños.